clase.jpgLa Federación de Enseñanza de USO-Andalucía (FE-USO-A), ante el inicio de un curso académico ciertamente complicado, por circunstancias diversas, que han preocupado seriamente al conjunto de los trabajadores de la enseñanza, manifiesta que:

  1. Desde el comienzo de la crisis económica, con sus evidentes repercusiones en nuestro mercado laboral, la USO viene manifestando que es necesario aplicar políticas de austeridad, un control riguroso del gasto público y una ejemplar transparencia en su gestión.
  2. Ello implica que los recursos públicos deben garantizar especialmente la calidad de los servicios básicos y esenciales a los ciudadanos: la educación, la sanidad, la dependencia y las pensiones.
  3. La FE-USO-Andalucía recuerda que el profesorado andaluz ya viene contribuyendo a la salida de esta grave crisis poniendo, desde junio de 2010, el 5% de su salario anual; porcentaje que esperamos ver restituido en el momento en que superemos esta extrema situación.
  4. Rechazamos el aumento de jornada lectiva del profesorado que algunas comunidades autónomas han llevado a cabo, por el deterioro en la calidad de la educación y por la reducción en la creación de empleo que implica.
  5. Aunque en Andalucía, no se ha producido el incremento en la jornada lectiva del profesorado (ni en pública ni en concertada), los recortes han motivado que el crecimiento del empleo prometido por el presidente del gobierno andaluz, Sr. Griñán, sea ciertamente testimonial en la enseñanza pública y ridículo en la concertada.
  6. La grave crisis económica que soportamos, no exige -a nuestro juicio- la aplicación ineludible de los recortes en la inversión pública en educación que han efectuado el Gobierno central y algunas Comunidades Autónomas, incluida Andalucía.
  7. Esta situación, vinculada al crecimiento del alumnado en Andalucía y en el resto de España, ha dado lugar al aumento del número de alumnos por profesor, y por tanto, a un aumento significativo del trabajo final del profesorado, con la consiguiente merma en las condiciones de calidad educativa que en la USO reivindicamos.
  8. Rechazamos todos los recortes presupuestarios en educación; máxime si tienen una repercusión negativa en el empleo. Creemos que la necesidad urgente de nuestra sociedad para salir de la crisis es, precisamente, la creación de empleo.
  9. Defendemos que es preciso dar a la educación la mayor prioridad presupuestaria en momentos de crisis, justamente porque una educación de calidad es la herramienta más eficaz e imprescindible para superar dicha crisis.
  10. Sostenemos que es un error aplicar políticas que actúen sobre la educación, desde la perspectiva negativa y única de reducción del gasto. Para FE-USO-Andalucía, el presupuesto en educación es siempre una inversión a medio o largo plazo, esencial para garantizar un futuro mejor a cualquier sociedad.
  11. Seguimos defendiendo que el profesorado es la pieza clave para conseguir una educación de calidad. El prestigio del profesorado y el reconocimiento de la función docente no pueden ser cuestionados porque ello debilita al sistema educativo y lo daña gravemente.
  12. Creemos que la jornada laboral de los docentes debe guardar un equilibrio razonable entre el tiempo dedicado a la impartición de clases (horas lectivas) y la carga de trabajo no lectiva, que ellas exigen (preparación, correcciones, evaluación, tutoría, atención a la diversidad, permanente formación, participación en planes y proyectos educativos, etc.).
  13. Defendemos que la plantilla del profesorado en los distintos centros educativos tiene que planificarse en función de las necesidades de cada uno de ellos. Una reducción de personal docente, de especialistas, de orientadores, etc., supone un deterioro del servicio educativo y perjudica la igualdad de oportunidades del alumnado, especialmente las de aquellos alumnos con mayores dificultades en el aprendizaje.
  14. Finalmente, en la FE-USO-Andalucía creemos que, en el actual escenario de reducción de la inversión pública en educación, difícilmente se puede pretender mejorar la calidad de la educación, ni en Andalucía, ni en el resto de España. Con estos recortes, no creemos posible reducir las altas tasas de abandono y fracaso escolar (que en Andalucía son alarmantes), mejorar la Formación Profesional, reformar el cuarto curso de la Enseñanza Secundaria, programar objetivos educativos para el año 2020 y tantos otros retos actuales de la educación.