María Dolores Fernández-Figueroa es la responsable del sector de Educación Infantil 0-3 años en FEUSO Andalucía. En la siguiente entrevista analiza la situación de dicho sector en nuestra región, cómo le ha afectado la COVID-19 o algunas de las últimas medidas aprobadas desde la administración pública, caso de la LOMLOE.
¿En qué situación se encuentra actualmente la Educación Infantil andaluza?
Se han creado muchas plazas escolares a la par que descendía la natalidad. De 123.590 plazas ofertadas por la Consejería de Educación, este año se han escolarizado 79.000 niños y niñas, quedando vacías 44.500 plazas en dicho ciclo. Como consecuencia de todo esto, se han llegado a cerrar hasta 100 centros de Educación Infantil en Andalucía. Esto quiere decir que este sector, que da empleo fundamentalmente a mujeres, vuelve a sufrir un aumento del paro, bien por despidos o por reducción de jornada laboral.
Asimismo, hay que destacar la incertidumbre generada por los retrasos de la Junta de Andalucía en el calendario de pagos, lo que ha incrementado la dificultad para que estos centros puedan mantener correctamente su actividad y los abonos de los salarios.
¿Cómo está afectando la COVID-19 a este ámbito educativo?
Los centros de Educación Infantil han sabido sobreponerse a las dificultades generadas por esta pandemia, convirtiéndose en un lugar seguro. El personal de dichos centros ha mantenido un estricto protocolo higiénico-sanitario, lo que ha permitido que la incidencia fuera mínima. No obstante, las familias han tenido miedo al virus y se ha reducido considerablemente el nivel de escolarización, lo que ha producido que quedaran tantas plazas vacías.
¿Se están ofreciendo las ayudas necesarias, tanto en materia de prevención contra el virus como de apoyo económico, por parte de las administraciones?
Una ayuda importante ha sido la guía de medidas de prevención, protección, vigilancia y promoción de la salud para los centros educativos, elaborada por la Consejería de Salud y Familias, así como las instrucciones de 16 de julio de 2021 relativas a la organización de las escuelas infantiles y centros de educación infantil para el curso 21/22 de la Consejería de Educación y Deporte.
Desde FEUSO hemos realizado peticiones importantes, como ha sido el cambio de geles hidroalcohólicos por jabón, pues para un alumnado con edades tan tempranas no está recomendado. Por otra parte, hemos considerado que las trabajadoras no han estado protegidas con las mascarillas quirúrgicas, pues es un grupo estrecho de convivencia y es imposible, con un alumnado de estas edades, mantener las distancias de seguridad, por lo que consideramos que se les debería haber facilitado la mascarilla FFP2.
Respecto al apoyo económico en caso de cierre total o parcial del centro, la administración andaluza ha estipulado de nuevo para este curso 21/22 la misma subvención que el pasado, el 85% del precio público mensual del servicio de atención socioeducativa (sin incluir el servicio de comedor). Desde FEUSO Andalucía seguiremos reivindicando que se siga abonando a los centros el 100% del coste y no se rebaje al 85%. Son muchos los gastos que tienen que seguir asumiendo aunque el centro esté cerrado.
¿Cómo valora la reciente iniciativa anunciada por el Gobierno de priorizar la creación de plazas públicas en el ámbito de Educación Infantil? ¿Qué puede suponer para el sector en Andalucía?
En Andalucía tenemos unos 1.200 centros privados adheridos y cerca de 700 públicos –teniendo en cuenta los de los ayuntamientos y los de la Junta de Andalucía–, por lo que no tiene sentido crear plazas escolares nuevas cuando hay un exceso. Esos fondos deberían destinarse a avanzar en la gratuidad y confiemos en que finalmente así suceda. Recientemente han acudido al Congreso de los Diputados, tres grupos parlamentarios andaluces – Grupo Popular; Ciudadanos; y Grupo Socialista- a defender, mediante una Proposición de Ley, esta reivindicación que habíamos realizado en innumerables ocasiones desde colectivos como FEUSO Andalucía. Los centros de Educación Infantil deben ser gratuitos para las familias, ya que realizan una importante labor educativa y asistencial, para así favorecer la inserción laboral de la mujer y la conciliación familiar.
Ante este el controvertido panorama que ha dibujado la pandemia y las medidas promovidas por la administración, ¿qué iniciativas se han venido planteando desde FEUSO Andalucía en beneficio de los derechos de los trabajadores de la Educación Infantil?
Destacaría varias. Trabajamos por el mantenimiento del empleo de un sector mayoritariamente femenino, valorar y prestigiar el extraordinario trabajo de estas profesionales, y hay que darles acceso a formación para incrementar su capacitación profesional. Respecto a la administración, les exigimos un compromiso serio en cuanto al calendario de abonos, que no haya más retrasos, y un aumento de campaña de escolarización para este ciclo.
¿Por dónde pasa el futuro de la Educación Infantil andaluza? ¿Qué propone FEUSO Andalucía al respecto?
La Ley Celaá deja clara su preferencia por la escuela pública. La LOMLOE, en su Disposición Adicional 3ª, deja clara su voluntad de elaborar un plan para avanzar en ocho años en la oferta pública, y de esta manera alcanzar la gratuidad. Esto pone en peligro miles de puestos de trabajo y de centros enteros. Desde FEUSO Andalucía pensamos que las administraciones públicas deben habilitar diferentes vías de financiación que hagan efectivo el derecho universal a la escolarización en el ciclo 0-3 años para todas las familias, tanto en plazas públicas como en privadas adheridas, respetando así la libre elección de las familias. Exigimos, por tanto, la gratuidad universal del ciclo 0-3 años en todos los centros, aportando la idea de conciertos, como ya sucede en otras etapas educativas.