portada.pngUn año más, otro 25 de noviembre, desde USO expresamos nuestro rechazo y condena firme a la violencia contra las mujeres, volviendo a exigir su erradicación. Constatamos con indignación que en este 2015, lejos de apreciarse una disminución de las víctimas, sigue la estela sangrienta de años anteriores. En lo que llevamos de año, 48 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o ex parejas –de las que solo 9 habían denunciado-, 3 menores han perdido la vida y 44 menores han quedado huérfanos.

USO vuelve a exigir al Gobierno que asuma realmente el compromiso de poner fin a la violencia machista, poniendo en marcha los medios necesarios para activar políticas integrales enfocadas a la eliminación de la violencia machista, y solicita a los medios de comunicación, a la comunidad educativa y a la sociedad en general que tome esta lucha como propia, como un objetivo de todos y todas.

Del total de víctimas mortales, el 23% eran mujeres de hasta 30 años. Por ello, la campaña de USO con motivo del 25 de noviembre está dirigida a denunciar el alarmante aumento de la violencia de género entre los jóvenes y la preocupante percepción que de ella tiene el colectivo juvenil, asumiendo la violencia de control como algo normal. Bajo el lema `Hay golpes que no los ves´, USO quiere denunciar esta falta de sensibilización y de percepción de la violencia entre la juventud, para lo que es fundamental la concienciación desde edades tempranas y el fomento de la educación en igualdad, como ejes fundamentales en la lucha contra la violencia de género, y más recursos destinados a la prevención, sensibilización y protección de las víctimas.

La violencia de género continúa siendo una lacra
El Gabinete de Igualdad de la Unión Sindical Obrera ha elaborado el informe “Violencia de Género 2015”, a través del cual se ofrece una visión global acerca de la situación de la violencia machista en España, su incidencia entre los jóvenes, su peso en los Presupuestos Generales del Estado, así como los pilares sobre los que se debería sustentar la erradicación de esta lacra social.

En este informe se constata que, a pesar de que la sociedad española está concienciada contra la violencia de género, las cifras de mujeres y menores asesinados no disminuyen. Casi el 60% de las víctimas mortales se encontraba entre los 31 y los 50 años de edad; el 16% corresponde a víctimas con edades entre 65 y 74 años. Pero es la franja entre los 21 y los 30 años la que, a juicio de USO, requiere de una especial reflexión, ya que hemos pasado de 7% de víctimas en esa franja de edad al 23%, con 10 víctimas jóvenes, demasiado jóvenes.

En cuanto al número de denuncias, durante el segundo trimestre de 2015, se registraron un total de 32.023 denuncias, aumentando en 324 respecto del año anterior (1,02%). Pero, en el lado opuesto, han aumentado también las renuncias al proceso (3.985), lo que supone el 13%, aumento que viene produciéndose desde el inicio de la crisis económica. Desde USO llevamos años denunciando la peligrosa vinculación de las consecuencias de la crisis económica y la reforma laboral con el recrudecimiento de la violencia contra las mujeres y en el descenso de las denuncias, ya que ellas sufren especialmente el desempleo y la precariedad laboral.

Asimismo, el informe recoge el importante recorte presupuestario que ha sufrido la Igualdad a lo largo de la legislatura (20,9%), así como en el presupuesto para la prevención de la violencia machista, que se ha recortado un 26% desde 2010. A pesar de la subida del 6,32% para 2016, la partida se queda en 25,2 millones de euros, lejos de los 34,3 millones de hace 6 años (lo que cuestan 8 km de autovía), y aunque el presupuesto se incrementa respecto a 2015, no soluciona los recortes acumulados en estos años ni se acerca a las cifras de 2009.

Prevención, denuncia y recursos
En la lucha contra la violencia machista, la apuesta por la sensibilización es esencial. A diferencia de Europa, en España las mujeres no denuncian y menos su entorno -sólo dos casos han sido denunciados por personas del entorno en 2015-, las víctimas tienen miedo, bien por el agresor, por el sistema de protección que no garantiza su seguridad, etc.

Sin la prevención seguiremos sumando víctimas, sin la educación en igualdad seguirá aumentando entre los jóvenes las actitudes machistas y sin una buena intervención y coordinación de todos los servicios sociales y policiales implicados, las mujeres seguirán sin denunciar.

La denuncia es un mecanismo efectivo para contribuir a la lucha contra la violencia machista pero la víctima debe estar informada y sobretodo sentirse respaldada y protegida. La magnitud del problema es mayor que la que muestra la fría estadística y no podemos olvidar que las víctimas son mujeres y menores con nombre y apellidos. Tenemos una Ley pionera y modelo en muchos países que hay que seguir actualizando y sobre todo dotando de medios para que sea eficaz y podamos hablar de una sociedad igualitaria y libre de violencia.

MANIFIESTO EN VERSIÓN IMPRIMIBLE. (PDF)