Por fin, en la reunión que hemos mantenido sindicatos y patronales el día 3 de diciembre, hemos podido alcanzar un acuerdo unánime la USO y las demás organizaciones sindicales y patronales para la mejora en las condiciones retributivas del Personal de Administración y Servicios (PAS) de los centros concertados de Andalucía. Este acuerdo se va a trasladar inmediatamente a la Consejería de Educación, para ser abordado en el seno de la Mesa de la Enseñanza Concertada.

Aún nos queda mucho para materializar el complemento retributivo para el PAS de los centros concertados de Andalucía que la USO reivindica, pero el acuerdo que hoy hemos alcanzado, sin duda, va a facilitar que podamos conseguir este objetivo irrenunciable, por el que la USO se movilizó en solitario, hace casi un año y que estamos convencidos, lograremos con mucho tesón, con mucha paciencia y con mucha decisión. Entonces, la USO dio el primer paso; ahora, todos los firmantes damos el segundo paso. Aún queda mucho, pero ya queda menos. Lo decimos sin triunfalismos, con humildad, pero siendo conscientes de que cuando tenemos razón en una reivindicación (¡y en esta lucha tenemos toda la razón porque luchamos por los compañeros y compañeras más desfavorecidos de los centros educativos de España) y luchamos tenaz e inteligentemente por ella, siempre, siempre, la conseguimos.

El Acuerdo alcanzado (PDF, 2,9MB) es, en realidad, una declaración de intenciones compartida, que trasladamos a la Consejería de Educación, que es la que tiene que aportar los fondos propios necesarios para hacer posible el incremento retributivo que exigimos (como en otras once comunidades autónomas ya hemos logrado), que servirá para mitigar, al menos en parte, la pérdida acumulada del poder adquisitivo de los salarios del PAS registrada en estos últimos años, y que los otros sindicatos firmantes avalaron con su firma del regresivo V Convenio y de las siguientes revisiones salariales que aceptaron. Volvemos a recordar que la USO ni firmó ese convenio, ni las siguientes revisiones salariales, por lo que creemos tener suficiente fuerza moral y coherencia para mantener nuestra posición crítica.

Somos conscientes de que el momento actual es un mal momento para plantear nuevas reivindicaciones económicas al Gobierno de Andalucía, soportando –como soportamos- unos índices de desempleo y de precariedad laboral que superan todas las marcas en Europa. Pero, en la USO creemos que para lograr finalmente esta justa reivindicación, es decisivo que “empiece a sonarle” a la Consejería; que vaya tomando conciencia de la necesidad de la misma. A principios de este año, fue la USO en solitario quien prendió esta mecha, en las puertas de Torretriana; ahora, todas las organizaciones que componemos la Mesa de la Enseñanza Concertada, hacemos nuestro ese planteamiento por el PAS. No sabemos con qué grado de compromiso real actuarán las demás organizaciones y no queremos hacer ningún prejuicio. Pero comprometemos que la USO va a “recordar” continuamente (de las diferentes maneras que sabemos hacerlo) a la Administración Educativa esta necesidad urgente para el PAS de los centros concertados andaluces.

Cuando logremos que la Administración Educativa andaluza incremente, con una partida propia, la cantidad destinada a la partida de Otros Gastos (de la que se pagan los salarios del PAS) establecida en los Presupuestos Generales del Estado, nuestro compromiso común será destinar una parte de esa cantidad a un complemento retributivo autonómico para el PAS y, la otra parte restante, a los centros para su mantenimiento, tratando de que recuperen el poder adquisitivo perdido en estos últimos años.

Pues bien, lo siguiente puede sorprender a algunos: Antes de formalizar nuestra firma en el texto del acuerdo (que habíamos acordado previamente los sindicatos, en líneas generales, dos días antes) observamos que era conveniente que el texto recogiera una precisión acerca de qué parte que iría al PAS del total que pudiéramos lograr (en su momento) de la Consejería de Educación. La USO propuso que el acuerdo recogiera expresamente que al complemento retributivo del PAS “fuera destinada la mayor parte de la cantidad que pudiéramos lograr”. Ninguna de las organizaciones patronales manifestaron su disconformidad. Pero los otros tres sindicatos se opusieron. ¡Vivir para ver!

Finalmente, todos firmamos el texto del acuerdo. En la USO hemos creído más importante facilitar el acuerdo (aunque no logramos entender la posición de los otros sindicatos), para que “la pelota esté en el tejado de la Consejería” cosa que, por cierto, ha costado bastante trabajo, porque algunas organizaciones eran muy remisas.

En relación con el otro asunto pendiente de negociación, referido a la Reducción de la Carga Lectiva (RCL) del profesorado de las etapas postobligatorias (Bachillerato, Ciclos Formativos y PCPI´s), las organizaciones patronales respondieron unánimemente NO a una propuesta de los demás sindicatos (a la que USO no se quiso sumar, porque era una propuesta maximalista, que suponía volver al pasado y atascar la negociación). Cómo sería la propuesta que, una vez desmontada por la patronal, punto por punto, ninguno de los representantes de estos sindicatos, volvió a defenderla. A la USO nos parece que actuar de este modo poco responsable supone una pérdida de tiempo y de crédito. Creemos que plantear maximalismos, que rápidamente se desploman, no prestigia precisamente a los sindicatos. En la USO creemos que hay que fundamentar muy bien cualquier propuesta con sólidos argumentos y, si no se logra sacarla adelante, presionar con los medios que tenemos a nuestro alcance. No es mejor sindicato el que más pide, sino el que logra más, con menor coste para los trabajadores. A la USO no nos encontrarán en esas actuaciones.

Por nuestra parte, volvimos a proponer que, en una primera fase podríamos alcanzar un acuerdo sobre esta materia que recogiera el objetivo sindical de llegar a las 23 horas lectivas semanales, de manera generalizada, sin renunciar a las 22 que creemos serían posibles en algunos centros. Creemos que un acuerdo de esta naturaleza, con las cautelas que las patronales estimen oportunas, sería una buena base de referencia y que, además, podría ser implantado en cada centro contemplando sus singularidades, revisadas por la dirección y por los representantes de los trabajadores que, en el caso de posibles actuaciones abusivas, tendrían a la Comisión de Seguimiento como mejor garante de rigor y de objetividad.

Finalmente, acordamos que en la próxima reunión prevista para el día 14 de enero de 2009, las organizaciones patronales presentarían una propuesta, en la línea anterior, tratando de dar respuesta a los planteamientos sindicales.