La Federación de Enseñanza de la Unión Sindical Obrera de Andalucía (FE-USO-Andalucía) ha decidido convocar una jornada parcial de HUELGA el día 24 de abril, junto a otras organizaciones sociales, en el ámbito laboral de los centros concertados de educación diferenciada de Andalucía, para mostrar públicamente el rechazo de trabajadores y familias de estos centros a la decisión de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía de retirarles el concierto educativo, por el mero hecho de impartir un modelo pedagógico que no coincide con el impuesto por el gobierno andaluz.
Durante la jornada, hemos convocado una MANIFESTACIÓN en Sevilla, que partirá a las 12 horas desde la Plaza de la Encarnación (“Las Setas”) y concluirá a las 13:30 horas ante el Parlamento de Andalucía (ver PDF). A la misma, convocamos a todos los trabajadores y familias afectadas (porque pueden perder su puesto de trabajo o porque pueden perder el derecho a elegir libremente el tipo de educación para sus hijos) y a los ciudadanos, en general que compartan nuestros objetivos.
La USO ha protagonizado –en solitario o junto a otras organizaciones sociales- numerosas iniciativas, acciones y movilizaciones a favor del mantenimiento de los puestos de trabajo y por la renovación de los conciertos educativos en estos centros. Hemos luchado denodadamente, dando la cara, en la Mesa de la Enseñanza Concertada, en diversos artículos de opinión y pronunciamientos públicos, en concentraciones de trabajadores y presentando Recurso Contencioso Administrativo ante el TSJA. Pero todo ello no ha bastado para que la Consejera de Educación cambie su decisión -arbitraria, injusta, sectaria y enormemente irresponsable- que implica para los trabajadores afectados un daño extraordinario -ya que podrían perder su puesto de trabajo- y un ataque frontal contra el derecho constitucional de las familias a la hora de elegir el modelo de educación que quieren para sus hijos.
La USO no va a permitir, sin emplear todos sus fuerzas para evitarlo, que para el próximo curso puedan perderse más de 50 puestos de trabajo por un motivo exclusivamente político y sectario. Si, finalmente, la Consejería prosiguiera con su actual política educativa contra estos centros, destruiría 289 puestos de trabajo directos entre docentes y personal de Administración y Servicios, de plantilla, además de otro centenar entre los trabajadores de contratas externas de comedor, limpieza, transporte, etc.